A veces -aunque nos guste la marcha- uno prefiere aburrise pues es señal de que todos están descansando en sus casitas y nadie necesita ayuda de forma urgente.
A esas horas el personal se va dividiendo en dos grandes grupos: los que fuman y los que non.
Los fumadores siempre han tenido la ventajosa posibilidad del escaqueo unos minutos...lo que tardaba en consumirse un piti o dos si son pocos... aunque llevamos unos añitos en los que:
La Ley 42/2010, de 30 de diciembre de 2010, más conocida como nueva ley antitabaco es una ley española que entró en vigor el 2 de enero de 2011, como modificación de la anterior ley antitabaco 2006, y que extiende de la prohibición de fumar a cualquier tipo espacio de uso colectivo,local abierto al público, que no esté al aire libre, con excepciones, además de prohibirlo en algunos lugares abiertos, limitando lo que se entiende por espacio cubierto.
Según la nueva ley: fumar donde está prohibido se considerá una falta leve. Si se hace de forma aislada, la multa será de 30 euros!!!!!
Fumar en estos tiempos es todo un ritual (sobre todo el que se lo lía a mano -antes a mano solo se liaban los cigarros ecológicos comúnmente conocidos por porros-)...con total parsimonia y bata en lo alto el fumador debe alejarse a una distancia prudencial del centro de trabajo, buscar una ubicación al aire libre -hay que reconocer que está un poco mal visto el vicio con uniforme sanitario-, y liar y/o encender el pitillo siempre lejos del área de influencia aprovechando la coyuntura para contarse cualquier intimidad, chascarrillo, bulo, preocupación...la verdad, es un gran momento para liberar tensiones y conocer gente nueva.
En los particulares rincones del tabaco o fumaderos es donde realmente se 'cuecen' los grandes cambios sociales, las negociaciones más difíciles, las confesiones más inconfesables, las esperanzas desesperadas...es el foro donde todo o casi todo está permitido bajo el influjo de la nicotina, es la caja donde al final de la partida se guardan peones, reyes o alfiles; es punto de encuentro donde nadie es médico, enfermera, auxiliar o celador...aquí se es fumador.
-Creo también que todo el que no fuma debería poder salir aunque fueran tres minutos cada hora a airearse, contar o incluso a gritar parar liberar el estrés acumulado de la guardia...pero ojo nada de declararse fumadores pasivos aprovechando el parón para el escaqueo sin unas necesidades nicotinicas que los avalen.-
Me acuerdo aún cuando se fumaba dentro de las consultas de los centros de salud y hospitales; hoy sería impensable que un médico pasara su cupo con el cenicero a reventar ( como el cenicero del bingo ) encima de la mesa y a veces hasta con el cigarrillo encendido y la humareda en la consulta prohibiendo a nuestros pacientes pacientes el consumo de tabaco por su salud y bienestar...no soy tan mayor y de veras que eso lo he vivido yo.
"El médico, por su profesión, debe predicar con el ejemplo para evitar la pérdida de credibilidad", defiende el presidente de la Sociedad Catalana de Cardiología, Jordi Bruguera. "Si el paciente sabe que su médico fuma, disminuye y relativiza mucho el valor de los consejos del médico sobre el riesgo que comporta el tabaco y anula el refuerzo psicológico imprescindible para seguir las recomendaciones del médico".
Recuerdo también que cuando estábamos descansando unos minutos en nuestras salitas para personal de guardia (les llamamos: estar), llegaba el médico y decía entre una humareda que parecía niebla londinense: enfermeros, hay que coger una vía y ponerle nolotil en cien cc de suero fisiológico. Tras su petición miraba al personal y acto seguido sentenciaba: tú no que estas fumando, que salga el otro que no está haciendo nada. ¿Cómo? No estaba haciendo nada no...es más no había parado más que ese momento...así que al final, incluso me anime a encenderme algún que otro cigarrillo para poder descansar el ratito de echar humo. Al final, nuestros médicos descubrieron que era mejor para nuestra salud otro tipo de afirmaciones como: cuando te acabes el cigarro vienes que tengo trabajo para ti. Ya no estaba vulnerado el principio ético de igualdad en cuanto al trato al fumador/no fumador y eso consiguió que muchos dejaran de fumar. Por cierto, recuerdo con aprensión, aquellos techos que estaban totalmente amarillentos de todas las partículas que el humo dejó pegadas.
No os lo creeréis pero he visto fumar en lugares insospechados: uno de ellos un quirófano y si alguno se echaba las manos a la cabeza el otro concluía muy científicamente que no pasaba nada que el humo era estéril...el otro lugar fue un paciente al lado de su bombona de oxígeno...eso si cerrada...todo un reto para los que no fumaban y se dedican a la conversión del vicioso y a ganar adeptos a su causa, ellos que en unos años pasaron de ser apartados a perseguir apestados consumidores de un vicio que se está poniendo a precios desorbitados...que es casi un artículo de lujo en estos tiempos revueltos de crisis que vivimos.
Un fumador adulto español gasta al año una media de 744 euros en tabaco y el 78% de los fumadores españoles consumen en torno a 20 cigarrillos al día.
Como ex fumador y personal educador en salud mi intención es invitaos a dejar el tabaco cuanto antes y para animaos os dejo esta infografia para que calculéis como os vais a recuperar en tan solo unas horas hasta quedar limpios en 10 años y los beneficios:
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